247 - El director para Transporte del Banco Mundial, Pierre Guislain, elogió la política de reducción de la velocidad máxima para los automóviles en la ciudad de Sao Paulo pero advirtió que los límites dentro de las ciudades del país son en general muy altos.
El funcionario, quien se encuentra en Brasilia para un encuentro mundial sobre seguridad vial organizado por la propia entidad crediticia, dijo a Folha de S.Paulo que las ciudades que lograron disminuir los índices de accidentes bajaron a 30 kilómetros por hora la velocidad máxima en las áreas centrales.
Según los cálculos del banco, las muertes en el tránsito en Brasil llegan a 45.000 por año, con pérdidas estimadas en 90.000 milllones de dólares anuales.
El director del BM critió a los automóviles brasileños por la falta de seguridad, y destacó que eso ocurre pese a que la industria adopta "estándares elevados para los autos que exporta a Estados Unidos y Europa".
La creciente cantidad de motos en las calles también impone un desafío al país.
En ese sentido, recomendó que se deben adoptar campañas de prevención para que morir en el tránsito sea una posibilidad remota mientras que la posibilidad de ser detenido por la policía sea elevada o vista como elevada.
Guislain recomendó también la inversión en transporte público como una importante maneera de reducir las muertes en accidentes de autos, pero recordó que una expansión del transporte público tiene que estar acompañada de un gerenciamiento cuidadoso de la seguridad de los peatones, ya que inevitablemente el mayor uso del transporte resultará en más gente caminando en las calles.