La tributación de los dividendos podría disuadir el capital extranjero, afirma el director ejecutivo de Engie.
Eduardo Sattamini afirma que la propuesta del gobierno podría reducir la competitividad de Brasil para los inversores internacionales.
247 - El presidente de Engie Brasil Energia, Eduardo Sattamini, afirmó este martes (4) que el proyecto de ley que prevé un gravamen del 10% sobre los dividendos distribuidos a personas físicas podría reducir el flujo de inversión extranjera en Brasil, especialmente la de empresas europeas. Las declaraciones se realizaron durante el Foro Francia-Brasil, celebrado en São Paulo.
La información fue publicada originalmente por Valor Econômico. Sattamini explicó que, dadas las diferencias entre los regímenes tributarios internacionales, la medida podría hacer que Brasil resultara menos atractivo para los grupos extranjeros.
Según el ejecutivo, "las empresas europeas no pueden compensar la tributación de dividendos debido al régimen fiscal que tienen en el extranjero". Añadió que, con la propuesta, "la tasa impositiva efectiva sobre las inversiones en Brasil será muy alta, y las empresas extranjeras terminarán prefiriendo invertir en países donde el capital no está tan gravado".
El presidente de Engie también destacó que la medida podría afectar a los inversores a largo plazo, que buscan estabilidad y previsibilidad fiscal. «Para los inversores a largo plazo, la solución podría ser la exención o el aplazamiento de este pago, o cualquier otra medida que no afecte directamente a sus inversiones», afirmó.


